Con el avance de la tecnología cada vez son más las empresas que implementan una herramienta ERP dentro de su cultura empresarial; sin embargo, los negocios que no utilizan este tipo de instrumentos muchas de las veces lo dudan por el factor del desconocimiento, es por ello que analizaremos las ventajas que conllevan a la implementación de un ERP como una herramienta indispensable para tu negocio.
Principalmente la mejora más sustancial y que más impacta las unidades de negocio es la optimización del tiempo, es decir, el acelerar los procesos. Con el uso de los sistemas ERP ya no es necesario utilizar métodos que hoy en día son poco prácticos, tales como el llenado de hojas de cálculo para hacer reportes o en su defecto para inventariar o hacer un estado de cuenta.
Hoy en día la mayoría de los ERP en el mercado es capaz de hacer la conversión de la información en automático, logrando con ello el optimizar el tiempo de los procesos.
Otra de las grandes ventajas es el estandarizar el trabajo para todos los colaboradores de la empresa, es decir, el basar el uso de un sistema para que cada miembro de la compañía conozca fácilmente como realizar cada una de las labores que se le tenga asignada sin necesidad de un control o una revisión de su desempeño.
Además, uno de los factores clave en la implementación de un sistema ERP es el control de los procesos, es decir, da la capacidad de medir cada una de las actividades de los empleados, así como los niveles de productividad, comercialización y rentabilidad.
Otro de los grandes beneficios que se obtiene al insertar un sistema de esta índole en un negocio es el adaptar a los empleados a un sistema de trabajo estándar, lo cual también ayuda en la capacitación de personal de nuevo ingreso, además de ser un factor clave en la problemática de rotación de personal, logrando cubrir cada área con la menor curva de aprendizaje posible.
Entonces, ¿Por qué algunas empresas se rehúsan a utilizar tal herramienta?
Uno de los factores principales que influye es el precio, ya que se tiene la idea que la inversión en un sistema ERP es un gasto excesivo.
Otra de las desventajas que ven los potenciales compradores es la adaptación de los procesos, ya que algunos sistemas en la búsqueda de volverse más globales pierden calidad de adaptación volviéndolos más complicados de aprender.
Por último, a las empresas les preocupa el grado de eficiencia con respecto a la unidad de negocio, ya que algunos softwares son muy rígidos en sus mismos procesos, limitando su operación y funcionalidad dentro de la organización. Entonces, lo que se recomienda es que las empresas busquen un ERP exclusivo para su giro comercial, ya que el conseguir un sistema genérico suele ser más caro, menos adaptable y aun en menor medida funcional.
los ERP globales dominan el mercado, pero no siempre es la mejor opción a la hora de elegir un sistema de estas características.
Sin duda el elegir un ERP enfocado en el giro del negocio, brinda el beneficio de estar con especialistas en el rubro, quienes conocerán y optimizarán las funcionalidades del sistema en vías de lograr la eficiencia en tu negocio.